Cuando una persona es honesta se comporta de manera transparente con los demás, es decir, no oculta nada, y esto le da tranquilidad. Quien es honesto no toma nada ajeno, ni espiritual ni material: es una persona honrada. Cuando se está entre personas honestas, cualquier proyecto se puede realizar y la confianza en los demás se transforma en una fuerza de gran valor. Ser honesto exige coraje para decir siempre la verdad y obrar en forma recta.
Nilson Pérez Cardozo
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